Un cuento de ruido y furia
¿Qué fuerzas y qué corrientes mueven las grandes mareas que nos sacuden a todos en la economía mundial? ¿Es todo un batido caprichoso de rastrojo y sobras? ¿Tenía razón Shakespeare cuando escribió Macbeth?: “Life is but a tale told by an idiot, full of sound and fury, signifying nothing”.
De la misma manera nosotros, en este nuevo siglo, vivimos en esta confusa sopa de dolores y nos preguntamos si éstos están relacionados de alguna manera. Muchas cosas que pasan están mal, porque se pueden percibir los daños entregados o por venir: Que Japón haya abandonado la política pública en torno de su tasa de natalidad fue un gravísimo error, el mismo que cometieron muchos otros, notablemente Sur Corea, Italia, Alemania, Inglaterra, China, España, Brasil, Chile, el propio EU y muchos más. La política intolerante respecto de la inmigración es un gran error que causará, y ya produce, graves daños en inflación, crecimiento débil, falta de productividad y déficits fiscales y que se sopesa con parcos beneficios comparativamente –a saber, una tasa de crimen ligeramente menor en los países que se cierran–. Es verdad también que la corrupción y abuso en países pobres –África y Medio Oriente especialmente– causa de entrada la migración de esos mismos afectados, pero ese es un mal que quita beneficios a los receptores en forma neta.
Que Alemania se haya aferrado a su industria manufacturera para exportar y que hiciera a su economía depender de los autos por tantas décadas sin abrir vías de innovación en otros frentes como biotecnología, servicios o tecnologías de la información fue un error de estrategia. Casi toda Europa sufre de lo mismo y, en alguna medida, EU también (al menos en comparación con China y Asia) y con Trump tratando de regresar a las glorias de la manufactura, el futuro se lee desalentador para ellos.
Años de políticas económicas estériles, impulsadas por el reaganomics (bajar impuestos y regulación a favor de los grandes corporativos) causaron el movimiento extremo de la izquierda, con una delirante persecución de la imposible igualdad que nos ha llevado a una derecha populista casi en el extremo, tanto en América como Europa y que tanto costará en eficiencia, en intercambio comercial, tolerancia étnica y armonía social.
La manera de comportarse del gobierno americano es muy dañina. Décadas de abandono en la investigación básica y ahora recortes de presupuesto en las universidades a favor del gasto militar, le han dejado en desventaja contra China al menos en temas como 5G y 6G, energías renovables y baterías eléctricas –aunque en semiconductores y biomedicina aún es líder–. Esto pone a temblar a Trump, y no es aleatorio que guerre contra China, pues se siente expuesto a carencias de materias básicas como acero y petróleo y todas las complejas cadenas de suministro, a sabiendas también que no podrá competir por precio en el corto plazo –de ahí que busque el reshoring, pero no tiene la capacidad de armarlas domésticamente y sus políticas arancelarias universales no hacen ningún sentido y dejarán un legado de destrucción económica irreversible.
La desmedida ambición que tiene China por conquistar todos los mercados del mundo es un grave error, pareciera que a todo incrédulo le dijera: “tómala, ahí te voy!”. Para extraer de África y otros países pobres las tierras raras que requiere la era tecnológica moderna, abusa de las poblaciones a fuerza de bulldozer por dondequiera que pasa. Su crecimiento vino por la urbanización forzada de su población rural, lo que les ha dejado atragantados con un inventario inmobiliario de más de 16 años de absorción pendiente. Sin un sistema de seguridad social, la población lo ahorra todo en casas y eso es un error, pero entonces ahora que la urbanización ha parado, China quiere compensar exportando con subsidios todo de bien a todo aquél que se lo permita, eso es muy drástico y causará desmanes en el comercio, como lo estamos viendo con Trump. ¿Tiene entonces relación todo esto? Algunas cosas sí, pero otras, como dice Macbeth, no se entienden al menos en el plano terrenal.
En el siguiente ensayo conectamos los eventos económicos con los sociales pues ahí parece haber puntos.
Publicado en el periódico Reforma el 29 de Abril de 2025.
Written By Jorge Arturo Martínez González
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